Una damita llorona llamada Rosmery caminaba con su amigo Ricardo Navarro, mientras ellos caminaban Ricardo vio una planta y le dijo a Rosmery: mira, esa planta es muy rara. Rosmery le dijo a Ricardo: creo que he visto esa planta en un álbum que salió en El Comercio, se llama romero. Ricardo dijo: "romero"... qué nombre tan raro para una planta, y se comenzó a reír.
Luego cuando ellos se iban a ir de ese lugar Rosmery pisó la planta sin darse cuenta y una puerta se abrió, ellos entraron y Rosmery dijo que ese lugar tenía un olor a zorrillo, ellos siguieron caminando y vieron salir a unos ratones y también vieron un tallarín que estaba bailando. Caminaron hasta llegar a un lugar extraño, parecía que un bebito gigante hubiera pasado por ahí, luego vieron una tetera mágica, la que al frotarla se cumplían los deseos. Después salieron del lugar con la tetera mágica y pidieron todos los deseos que querían cumplir.
Luego cuando ellos se iban a ir de ese lugar Rosmery pisó la planta sin darse cuenta y una puerta se abrió, ellos entraron y Rosmery dijo que ese lugar tenía un olor a zorrillo, ellos siguieron caminando y vieron salir a unos ratones y también vieron un tallarín que estaba bailando. Caminaron hasta llegar a un lugar extraño, parecía que un bebito gigante hubiera pasado por ahí, luego vieron una tetera mágica, la que al frotarla se cumplían los deseos. Después salieron del lugar con la tetera mágica y pidieron todos los deseos que querían cumplir.
Briggite Novoa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario